jueves, marzo 24, 2005

Subirse en la 82 es como torear a la muerte

Cuántos de ustedes no se han subido alguna vez en la 82??? Y sí o no el chofer iba cómo en una carrera de autos, cómo si alguien lo persiguiera o necesitara urgentemente ir al baño??? Espero que no, porque estar en la 82, es cómo torear a la muerte.
Primero, ni bien pones el pie en el bus arrancan y luego aceleran y tienes que arragarte del primer fierro que ésté a mano porque si no te vas por la puerta! En todo el camino va rebasando, frenando a raya, acelarando, rebasando, frenando a raya, acelerando, frenando a raya, te vas para adelante, para atrás, para adelante, para atrás y cada vez que lo hace maldices mentalmente al chofer porque así nadie puede viajar tranquilo. Cuando te quieres bajar agárrate bien porque con la velocidad a la que va y la forma de frenar bien puedes irte contra el parabrisas. Le pides al chofer que pare pero te deja dos cuadras después, aduciendo que no es paradero, pero tú sabes bien que es porque el vigilante está ahí parado. Y ni bien pones un pie en la calle, arranca a toda la velocidad.
El lunes estuve tan pero tan indignada que no me dio pereza llegar al trabajo y llamar a la cooperativa a denunciar al bestia de chofer que me trajo en el bus. Aunque mis compañeros de la oficina me dijeron que llamaría por gusto porque en este país nadie hace caso a denuncias igual lo hice, y decidí llamar cada vez que sea necesario. Lo que la señorita me dijo fue que iba a decirle al jefe de choferes para que les llame la atención y sobre al todo al chofer que denuncié, claro que lo hice dándole el número de disco y placa. Desde esa tarde los choferes han sido más moderados al manejar, no sé si le habrán llamado la atención o simplementes es una coincidencia o adivinan que fui la que yo llamé y manejan despacio. Inevitablemente seguiré utilizando la 82.

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