viernes, noviembre 24, 2006

Y pues, vine de Panamá prácticamente a reunirme hasta súper tarde con Kelly para ultimar los detalles de la sustentación de nuestra tesis. A diferencia de otros amigos, estuvimos muy serenas y lo más importante es que no nos peleamos en los últimos momentos de nuestra tesis. El día de la sustentación no hubo nerviosismo ni preocupación, todo estaba fríamente calculado jejejeje y nos fue bien. Yo estaba tan aliviada por ese peso de encima que me estaba quitando, luego de la sustentación dormí como no había dormido hace mucho tiempo, fue un verdadero descanso. Ahora ya somos Ingenieras!!!! (ahora ya no me siento mal cuando me lo dicen jejejejeje).


lunes, noviembre 20, 2006

Mi viaje a Panamá

Era una difícil decisión: me quedo vacacionando en mi querida ciudad (es decir, sin poder dormir hasta tarde porque igual mi mamá se levanta temprano y solo viendo televisión y esperando que esté la comida, porque en mi casa se almuerza con suerte, a las 5 de la tarde, pudiera ser más tarde) o irme de viaje. El problema era que no tenía con quien, ya que mi compañera de viaje que me metió el bicho de tomar un avión y salir de este país, se echó para atrás. Los motivos, solo me dijo que era muy difícil de explicar (¿¿¿¿¿????) pero bue… respeté su decisión y no pasó nada… así que me decidí y me fui sola y… Dios sabe por qué hace las cosas… la pase increíble!!!!!

Cuando me enteré que mis vacaciones de 8 días habían sido canceladas, conseguí que me dieran justo los 5 días para el viaje diciéndole a mi jefe que si no me daba vacaciones esos días renunciaba (afortunadamente lo aceptó porque tal vez ahora estuviera aparte de desempleada, chira). Del coraje pasé una semana con una gastritis horrible, sentía un hueco en el estómago ni bien llegaba a la oficina, y este se me desaparecía cuando daban las 5 y 30 de la tarde y me podía ir a mi casa. El motivo por el cual me cancelaron las vacaciones era absurdo, pretendían que lo que no se hizo en 7 meses se lo haga en 5 días, pero esa es otra historia que no se las voy a contar porque solo de acordarme me empieza a doler el estómago.

En fin, viajé el Viernes 9 de Noviembre a las 7am en COPA con rumbo a Panamá. El vuelo estaba lleno, aproximadamente 96 personas. En el vuelo iba Ma. Teresa Guerrero con destino a no sé donde (porque no se quedó en Panamá) y bien camuflada, al parecer no quería que nadie la reconozca. Y lo logró, pasó desapercibida entre los pasajeros. El vuelo estuvo sin novedades afortunadamente, por las ventanas se podía ver el cielo despejado (no sé porque no tomé fotos) y el desayuno que nos brindaron estuvo muy rico. Llegamos a las 9h00 a Ciudad de Panamá. De las 96 personas solo nos quedamos 6 y el resto hizo trasbordo. A diferencia de lo que mis amigos que han viajado antes me han contado, no me hicieron mayores preguntas en migración y mucho menos me hicieron contar un solo centavo. Solo me preguntaron si viajaba sola (sí) y por qué motivo (de paseo).

Ya en el aeropuerto no fue difícil encontrar a William, la persona de la agencia de turismo que me llevaría al hotel. Esperamos por 2 turistas más para irnos y aprovechando el trayecto nos fue haciendo un city tour. Como Noviembre es el mes de la patria, puedes ver banderas de Panamá por todos lados. El hotel (Plaza Paitilla) era cómodo y agradable, aunque por ser el más pequeño quedaba opacado por los inmensos edificios de hoteles que están a su alrededor. Plaza Paitilla fue el primer hotel en Punta Paitilla, una zona de gente adinerada. Ni bien me acomodé en el hotel me registré con Yayura, la chica de la agencia que hacía los paseos, para un paseo nocturno por el Causeway y el obligado al Canal, city tour y compras. Es mejor contratar los paseos allá porque acá los venden a unos dólares más (me ahorré $15). La tarde la pasé en Albrook Mall solo recorriendo dos tiendas, porque sí que son inmennnnnnnnnnsas jajajajaja. La verdad es que eran inmensas y había de todo y todo tan barato. Jeans desde $0.99. Los Levi´s, Tommy y GAP que acá valen $50 allá se los encuentra a $20. Las blusas de DePrati de $12 y $18 estaban a $3 o $8. Los zapatos desde $1. Las carteras de Garfield desde $3. Hacen falta manos y maletas para guardar las compras.

En el Causeway de noche

En la noche conocí el Causeway y también a Andrea Mendigaña y su mamá, dos colombianas muy amables y agradables. Por suerte no soy tan renegada y no es muy difícil para mí entablar amistad y conversación y mejor! Porque así no la pasé tan sola. Con ellas recorrí el Causeway que es un corredor que une a 3 islas que las hicieron con la piedra que sobró del canal. La vida en el Causeway se enciende en la noche, es como una zona rosa, con bares, restaurantes y discotecas y un muelle donde corre una brisa deliciosa. Desde ahí puedes tener una linda vista de la ciudad tanto en el día como en la noche.

En el Causeway de día (de fondo la Ciudad de Panamá)

El día empezó temprano e iba ser pesado: Canal, city tour y compras!!! Lástima que estuvo lluvioso todo el día y es que en Panamá llueven 9 meses en el año y justo estábamos en el último. El bus del tour llevaba colombianos, argentinos, uruguayos, brasileños, dominicanos y una ecuatoriana. Allí me encontré con Andrea y su mamá. Sí que se encuentra gente adefesiosa en todas partes, un par de chicas iban bien pintadas y con zapatos de taco, no hubiera sido molestoso sino hubiera tocado esperarlas. Yo andaba con toda la pinta de turista, cuándo yo en guayaquil con bermuda y blusa de tiras???!!! Jajajaja. La guía nos iba indicando los sitios más importantes de la ciudad. Lo que más me llamó la atención fue conocer que en Panamá existe una universidad americana (Ciudad del Saber) en donde estudias como si estuvieras en EUA. Como durante mucho tiempo vivieron muchos americanos, la mayoría de panameños habla muy bien el inglés y existen ciudadelas que tienen la arquitectura de los barrios americanos. Cuando pasamos por unas casas colectivas que se veían bastante pobres, la guía nos dijo que no nos dejemos llevar por la fachada ya que muchos de esos departamentos por dentro son muy elegantes.
En la exclusa de Miraflores

Un barquito cruzando el canal

Ciudad del Saber

La entrada al Canal cuesta $3 pero si quieres ingresar al museo de 4 pisos (te recomiendo que entres) cuesta $8. Conocí solo la esclusa de Miraflores ya que recorrer todo el canal completo es un paseo que toma casi todo un día y un valor aproximado de $52. En el museo puedes apreciar todos los detalles del funcionamiento del canal y lo importante que es para el desarrollo de Panamá. Allí me encontré a mi vecina la señora Carmen Guevara (si lo hubiera planeado no hubiera resultado) jejejeje que también estaba de paseo.


Por la lluvia no pudimos conocer Panamá Vieja por lo que recorrimos un poco más de la ciudad y un centro de artesanías que por cierto me parecieron muy caras (uno que está acostumbrada a pagar $1 por un llaverito en el Mercado Artesanal). Si quieres traer recuerditos mejor aprovecha cuando estés de regreso y pasa por una de las tiendas que hay en el aeropuerto Tocumen, aunque no lo creas, son más baratas allí.

Finalmente el recorrido terminó en Los Pueblos, que es como una mini zona franca ya que encuentras todos los locales que están allá. Ir a Zona Franca te cuesta un taxi de $25 de ida y regreso si es que pierdes el bus y la posibilidad de que te roben porque saben que llevas dinero. Para recorrer Los Pueblos, sin exagerar, necesitarías 3 o 4 días. Imagínate 7 veces la Bahía de locales de ropa, electrodomésticos, zapatos, juguetes, etc., etc., etc. Yo no recorrí es nada, 5 locales porque entras en uno de esos que son como Tía y te pierdes de lo inmenso que es y quieres llevarte todo porque todo es barato y … bueno, lo que les dije arriba jejeje, es que aún no salgo del asombro de las tantas cosas baratas que se puede conseguir en Panamá jejejeje.

Antes de llegar al hotel pasé por una tienda de zapatos y la encontré a Andrea y su mamá llevándose casi medio almacén. Estaban de promoción unos Airwalk bacansísimos a $10 dólares (me traje uno). Ella me contaba que los zapatos deportivos son muy caros en Bogotá y que llevaba para toda la familia. Es que el peso está súper devaluado y es allí cuando uno se da cuenta y dice: Gracias por habernos pasado a dólares!!!

En la noche fui a merendar al MultiCentro, un centro comercial muy bonito. En Panamá encuentras McDonald´s, KFC, Taco Bell, Pizza Hut, las plazoletas de comida te parecen muy familiares jejejeje. Y como le digo a Jaimito, yo nunca salgo a hacer turismo gourmet así que esa noche me comí un arroz con pollo frito y jugo de naranja, aparte la plata que se gasta es la mía y qué me voy a estar echando exquisiteces caras!!!! No hombre!!!!

La mañana siguiente empecé con Albrook Mall no sin antes disfrutar del desayuno buffet que venía incluido en el hospedaje del hotel. Café, leche, pan, queso, jamón, huevos, frutas, jugos, hasta sentirse bien alimentado y aparte que sería el último ya que en la tarde partía al DeCameron en la playa. Hice otro poquito de compras más ya que aún no encontraba los encarguitos pero fue en la Oca Loca que conseguí las sandalias para Caro, que ya las ví acá a $12 en DePrati (me costaron $6).

A las 4 de la tarde ya estaba en el DeCameron Playa Blanca, a hora y media de la ciudad. Es un resort increíble (al menos para mí que nunca había estado en un lugar así) casi del porte de Ballenita. Muy acogedor y hecho para ir en familia o pareja, ese lugar vale la pena disfrutarlo con alguien (ahí me cogió al depre pero tuve que disfrutarlo de todos modos jejeje). En el DeCameron puedes comer y tomar todo lo que quieras las veces que quieras, estar todo el día en la piscina o en la playa si deseas, bajo sombra o bajo el sol. Es un verdadero paraíso que todos disfrutan. Te lo recomiendo!!!

Finalmente llegó el día de regresar, en la mañana disfruté del sol de Panamá, de la arena blanca que da el nombre a la playa y del mar. Me hubiera gustado bañarme en el Atlántico pero no pude (espero hacerlo pronto). En la tarde de un almuerzo sencillo porque con lo mañosa que soy para mí no es mucha emoción un buffet. Y partí hacia el aeropuerto cargando una maleta, una mochila y un bolso lleno de cosas (y yo era la que menos llevaba). En migración veía que a la gente les hacían poco y mas desvestirse, sobre todo a los centroamericanos. A mi solo me preguntaron de donde era y me hicieron pasar sin problemas. Tuve que dar vueltas casi 2 horas y media esperando que salga el vuelo y me arrepentí de no haber comido antes de pasar migración, dentro del aeropuerto solo hay un restaurante y lo más barato es una tostada que cuesta $5 y más la cola se hacen $7. Qué dolor!!! Pero ni modo, me moría de hambre y mejor que comí, porque el vuelo se retrasó dos horas y estuve merendando a las 11 de la noche.

En conclusión, fue una linda experiencia que me costó alrededor de $999 jajajaja paaaaro (hubiera buscado que me lo financie el PRE a ver si me salía gratichi)!!! La verdad es que aún no he hecho el cálculo de los gastos del viaje y no quiero hacerlo porque creo que me costó más o menos eso PERO eso no es lo importante, lo importante es que conocí otro país, tuve la experiencia de viajar y movilizarme sola en una ciudad desconocida, tuve la oportunidad de conocer personas, gracias a Dios regresé bien, disfruté mucho, me desestresé un poco y me gustó y creo que lo voy a repetir… a donde, aún no lo sé, pero lo que sí es seguro es que les estaré contando.