Yo he comido uvas, usado interior amarillo, agarrado billetes y lanzado monedas, justo a las 12 y cuando empieza el nuevo año. Este año, como el pasado, no hice nada de esas cábalas, casi me coge la llegada del nuevo año bañándome!!!
Este año tampoco mi abuelito recorrió toda la casa con una vasijita con unas yerbas quemándose y pasando ese humo por todos los rincones, como lo había venido haciendo hace algunos años. La verdad que no sé cómo se llaman esos montes, pero supuestamente es para limpiar la casa. Pienso que nadie limpia mejor la casa como mi tía con la escoba y el recogedor, pero bueno, allá él.
Mi prima siguió fiel a su baño de la suerte y a su interior amarillo, que la verdad no veo que les resulte mucho porque tiene gastritis desde hace tres años y no veo que esos baños le hayan ayudado, tampoco quedó con mucho dinero ahorrado. Lo que sí me parece que es algo bien irónico que una persona que va a misa todos los domingos y usa una cadena con una cruz enorme, crea en esas brujerías. Yo sé que la brujería existe, tengo pruebas, pero de lejitos con eso. En fin, nadie sabe lo que pasará este año, si será bueno o malo, pero sí pienso que la única cábala que debemos seguir es, justo a las 12, olvidar todo lo malo que hemos vivido, dejarlo atrás, y empezar el año con optimismo, decididos a cambiar las cosas que están mal en nuestras vidas y siempre con la esperanza que los días que vengan serán mejores.
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